
Ecuador.-El expresidente de Ecuador Rafael Correa denunció este jueves una «persecución política» después que la justicia ecuatoriana decidiera llamarlo a juicio, una decisión contra la que aseguró que dará la batalla ante la justicia internacional.
Me voy a dormir. Con la portada de El Telégrafo, es claro lo que va a pasar.
Se ratifica que el Caso Balda. es una farsa, y que todo es persecución política, porque no pueden derrotarnos en las urnas.
No se preocupen por mï, preocúpense por la Patria
¡Hasta la victoria siempre! pic.twitter.com/IpOmP4swY6— Rafael Correa (@MashiRafael) November 7, 2018
«Como no nos pueden ganar en las urnas, como no nos pueden derrotar, buscan todas estas excusas tremendamente graves», es una «persecución política», asegura Correa en una entrevista en Bélgica, donde reside desde su marcha del poder.
El mandatario ecuatoriano entre 2007 y 2017 reaccionaba así a la decisión de la jueza Daniella Camacho, de la Suprema Corte de Ecuador, de llamarlo a juicio por su presunta participación en el secuestro de un opositor en 2012 en Colombia.
Rafael Correa, de la derrota a la sospecha judicial en Ecuador #AFP https://t.co/xqFlIXiAN0 pic.twitter.com/67rOn69YKi
— Agence France-Presse (@AFPespanol) February 5, 2018
El expresidente, que afronta una orden de prisión preventiva, solo podrá ser enjuiciado si es capturado o si se presenta ante el tribunal, pues la ley impide que sea juzgado en ausencia por ese delito castigado con hasta siete años de cárcel.
Para Correa, la acción judicial, en su opinión plagada de «irregularidades» y un «fraude total», «no tiene ningún futuro». «Pretenden con eso tenerme desterrado siete, ocho años, hasta que prescriba» y «tenerme fuera el país para la próxima campaña (electoral), en marzo de 2019», agrega.
Siempre he sido optimista en el largo plazo, pero realista en el corto plazo.
No esperaba absolutamente nada de una “justicia” que recibe consignas, no argumentos.
Con esto me quieren mantener en el destierro varios años.
A nivel internacional no podrán sostenerlo, pero…— Rafael Correa (@MashiRafael) November 8, 2018
Desde Bélgica, de donde es oriunda su esposa, el ex jefe de Estado siempre ha negado cualquier implicación en los hechos y ha acusado a su vicepresidente de 2007 a 2013, y actual presidente Lenín Moreno, de orquestar un complot en su contra.
Preguntado sobre un eventual regreso para enfrentar el juicio, Correa lo descarta porque sería «regresar para que (le) masacren con la injusticia que vive el país». «Todo está tomado. Ecuador tiene un golpe de Estado. No tenemos Corte Constitucional, la destituyeron».