Ciudad de México.- El gabinete de Seguridad, en voz de Alfonso Durazo, confirma que los incidentes en Culiacán, se dieron como resultado de un enfrentamiento tras ubicar y detener a Ovidio Guzmán López, hijo de Joaquín «El Chapo» Guzmán.
Tras su detención, en Culiacán, se registraron varias balaceras en la capital de Sinaloa.
Pistoleros lanzaron una oleada violenta de bloqueos y balaceras en la ciudad, entre rumores de la captura de uno de los hijos del narcotraficante Joaquín Guzmán Loera.
En conferencia de prensa, Durazo detalló que en un patrullaje de rutina, elementos de la Guardia Nacional fueron agredidos desde una vivienda de Culiacán y repelieron la agresión.
